sábado, 11 de abril de 2015

TEMAS DEL DIARIO FILOSÓFICO

Hoy toca tratar los temas que eligieron mis alumnos para tratar en el diario filosófico. Por orden de preferencia, el más solicitado versaba sobre relaciones interpersonales, del que hablaremos más adelante con más de detalle, después el del miedo a la muerte y por último, asuntos de muy diversa índole, de entre los que destacan el de la inseguridad, la baja autoestima, la falta de sentido de la vida, complejos físicos, control excesivo, perfeccionismo, angustia por el futuro, mala gestión de las emociones. 

Como no es posible, exponerlo todo de una vez, empezamos con el primero, que de forma general, lo he etiquetado como relaciones personales. Pues bien, concretando, conversamos a través de las cartas, sobre las dificultades de establecer buenas relaciones con los amigos, con los padres y con la pareja. El de los amigos, que fue el prioritario, trató sobre la incomprensión, es decir, no sentirse entendidos por los demás y tener la convicción de ser utilizados por los amigos por puro interés. También se habló de la desconfianza hacia los amigos, de la vergüenza y de la inseguridad de ser uno mismo con los demás, del miedo a no ser queridos o aceptados, a no poder expresarse como ellos son por miedo al rechazo. En cuanto a la relación con los padres, destaca el de la incomprensión de los padres hacia los hijos, la falta de libertad y no ser aceptados como son ellos realmente. Por último el de las parejas, sólo apareció un caso sobre el miedo a ser dañado por su compañero y la respuesta defensiva del consultante.

Como no quiero alargarme más, el próximo día os remito a un fragmento de un diario tratando alguno de estos temas, bajo anonimato y previo consentimiento de mis alumnos, a los que agradezco querer compartir sus inquietudes y también quiero subrayar la valentía, por parte de ellos, al adentrarse en el camino del autoconocimiento.

miércoles, 1 de abril de 2015

DIARIO FILOSÓFICO



¿Qué es un diario filosófico?

En la Consulta Filosófica el objetivo que nos proponemos es alcanzar la clarificación y comprensión de situaciones que nos resulten problemáticas.  La forma más común de llegar a esa búsqueda de la verdad, se da generalmente, a través de un diálogo tipo socrático,  que se establece a través del consultante y el filósofo. Esta vez, os sugiero  el diario filosófico, que puede ser utilizado como una ayuda complementaria a la de la consulta en directo o a distancia (por ejemplo via skype) o, simplemente puede funcionar muy bien como actividad autónoma.

El diario se entiende como un procedimiento de la Consulta Filosófica en la que se produce un intercambio epistolar entre el consultante i el filósofo. El primero propone una cuestión que le genera preocupación o que quiere indagar con más profundidad. El filósofo, atento a las reflexiones del consultante, va haciendo preguntas con el propósito de que el propio consultante vaya adentrándose por sí solo  en el camino del autoconocimiento.  

Como ejemplo, hablaré de mi experiencia con los adolescentes, en el marco de mis clases de filosofía. A mis alumnos, les propuse una tarea muy sencilla, que aunque no nos permitiría profundizar mucho, por la falta de tiempo, sí les proporcionaría una clarificación y mayor conciencia de los problemas que les genera malestar.  Esta ampliación de la conciencia, ya por sí sola resulta ser ya transformadora para la propia persona  y permite que empiecen a darse algunos cambios. Antes de empezar, les introduje en algunos de los presupuestos básicos –que no son todos-  con los que trabajo: 1) La ignorancia de lo que somos provoca situaciones conflictivas. Algunas de éstas se generan por tener ideas limitadas, prejucios y creencias erróneas;  2) Los cambios vienen dados a través de la comprensión; 3) Todo puede ser comprendido, aunque en un principio no nos lo parezca; 4) en todas nuestras acciones existe un sentido positivo.

La primera actividad propuesta que habían de escribirme en forma de carta fue la siguiente: DESCRÍBEME UNA SITUACIÓN QUE TE GENERE CIERTA PREOCUPACIÓN, TRISTEZA, MIEDO O MALESTAR.. No ha de ser  necesariamente una experiencia muy íntima pero sí que se dé de forma regular a lo largo del tiempo.

Hasta aquí, llego por hoy. Próximamente, os daré los temas que mis alumnos me plantearon.